Reseña Verity (La sombra de un engaño) - Colleen Hoover
¡Hola chicos!
Hoy os traigo la reseña de una de las novelas que más me han perturbado (y enganchado) este año sin lugar a dudas. Una historia inteligente, que desciende a los pozos oscuros del alma humana y que te mantiene en un estado lector de absoluta irrealidad. Os estoy hablando de Verity la nueva novela de Colleen Hoover que la editorial Planeta se ha encargado de publicar. Si queréis leer una historia que os deje tan impactados como a mí, solo tenéis que seguir leyendo.
Un accidente. Una novela. Una nueva vida.
No es un golpe de suerte. Es lo que acabará contigo.
Lowen Ashleigh, una autora sin suerte con un acuciante problema económico, recibe el encargo de su vida: Jeremy, el flamante marido de Verity Crawford la autora superventas del momento, contacta con ella para que acabe de escribir la novela que su mujer, en coma debido a un grave accidente, no puede terminar. Para ello, Lowen se instala en la mansión familiar. Pero lo que parecía un sueño hecho realidad, acaba conviertiéndose en pesadilla cuando Lowen encuentra una documentación que no ha salido a la luz.
Madre mía.
Acabo de terminar el libro y sigo perturbada, en shock, sin saber qué pensar pero pensando todo a la vez. Lo cierto es que leo desde hace años a Coleen Hoover, porque libro que saca, libro que consigue o ponerte los pelos de punta o hacerte llorar a mares. Así que con una premisa de novela de misterio, sabía que tenía que leerlo sí o sí.
No quiero (ni debo) hacer spoilers, pero vaya libro para descender a rincones oscuros, qué mal rollo. No se puede contar mucho de la historia más allá de la pequeña descripción que os he hecho al principio, porque sería destripar la historia. Pero os puedo asegurar que es de esas novelas que te provoca dos sensaciones: por un lado, mientras lo lees no puedes parar de pensar en lo que está ocurriendo y cuando acabas, no puedes dejar de preguntarte ¿alguien puede explicarme qué es lo que acaba de pasar? En fin, Verity es de esas novelas que si algo consiguen, es hacerte pensar.
Es fascinante la capacidad que tiene esta autora de arrastrarte a aguas turbulentas, a rincones oscuros, a visualizar esa parte terrible del alma humana con una realidad, frialdad y precisión que hiela las venas.
Mientras uno lee Verity, solamente puede estremecerse. Y no es porque leamos algo truculento o propio de una peli gore. No, Verity es de ese tipo de novelas que te transmiten mal rollo por el clima que se genera. Es de esas novelas que como lector estás visualizando, las recubres con una capa de oscuridad y sabes, notas, percibes con cada fibra de tu ser que ahí, justamente entre sus páginas, hay algo raro.
Y eso precisamente es la genialidad de Verity: cómo consigue a través de sus páginas que sintamos que algo no funciona, que ocurre alguna cosa extraña en la historia pero no sepamos a ciencia cierta qué es. Porque como lector, con ello te atrapa, te perturba, te crispa los nervios y te genera un desasosiego del que no puedes desprenderte hasta que terminas sabiendo lo que ocurre bueno, después de saberlo tampoco, para qué mentir.
Uno de los grandes méritos de la novela es la capacidad que tiene la autora de construir personajes atípicos. Sí, los protagonistas son personas normales, como tú y como yo, viviendo una vida normal y con circunstancias muy habituales. ¿Entonces dónde está lo atípico? En que conocemos sus sentimientos. Somos espectadores de excepción del funcionamiento de su mente. Capaces de ver cómo actúan, pero a su vez, cómo piensan en realidad. Y es verdaderamente perturbador, porque en este caso, las diferencias entre la realidad y la voluntad son abismales.
No quiero explicar nada acerca de los personajes, porque creo que es mejor que los descubráis por vosotros mismos y os hagáis una idea equivocada de quién es cada uno de ellos. Aquí no se puede hablar de quién es quién o qué papel desarrolla, porque aún después de leer la novela, sigo siendo incapaz de tener a ciencia cierta una idea clara.
Leer la novela de Coleen Hoover ha sido una experiencia extraña: por un lado siento que he leído un libro inteligente, de esos que merecen la pena leer, pero a su vez, mientras lo he leído he sentido un rechazo terrible. Y es que sí, a medida que leas, el libro te generará rechazo, mal cuerpo. Tendrás que dejar de leer en algún momento e incluso pasarás un mal rato. Pero no podrás parar de leer.
Aparte de la cantidad de sentimientos encontrados que te genera la novela, otra de las cosas que la hacen tan especial es que especularás, harás teorías y se irán todas por la borda. Porque otra cosa no, pero con esta novela pensarás, recapacitarás, te harás preguntas y acabarás por no saber contestar ni una de ellas. La novela juega contigo, pero tú aceptarás jugar y probablemente perder en todo lo que apuestes. Porque otra cosa no, pero Verity es un juego en el que solo habrá un ganador. Y te aseguro que tú, lector, no lo serás.
¿Pero y el final? Porque en no pocas novelas en las que la tensión, la angustia o las teorías locas hacen acto de presencia a lo largo de la historia y la resolución de todo el lío acaba siendo una total decepción. Pues sin hacer spoilers, os puedo asegurar que el final de Verity es de esos que resultan todavía más perturbadores que la propia historia, las teorías que hagas o lo que puedas llegar a imaginar. Te deja con cara de tont@ y consigue que sigas pensando en lo que has leído tiempo después de haber cerrado la última página. Es, simple y llanamente, brutal.
En definitiva, Verity es una de esas novelas que es mejor encontrártelas a ciegas e ir descubriendo. Con una trama adictiva y muy inteligente, unos personajes atípicos y un clima que oscila entre el rechazo y la adicción, sin lugar a dudas, la novela de Colleen Hoover no te dejará indiferente. Recomendadísima.
NOTA: 4,5/5
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