¡Hola chicos!

Hoy os traigo mi opinión sobre la novela La bruja blanca, la primera parte de la trilogía Asesino de brujas de Shelby Mahurin y que se encarga de publicar la editorial Puck. Como esta misma semana se ha publicado la segunda parte, vengo dispuesta a intentar convenceros de que tenéis que leer esta novela. Así que en la reseña de hoy, os muestro los 5 motivos por los que tenéis que leer SÍ O SÍ la novela de Shelby Mahurin. ¡Empezamos!

Ambos iniciarán un carrera conjunta por salvar el pellejo... y su corazón.

Ya solamente con una premisa como esa, mi corazón débil se siente atraído a leer una novela como esta. Pero si eres una persona sin corazón más dura de roer, aquí van mis 5 motivos por los que tienes que dejar de ser Frozen y leer inmediatamente esta novela ;)

RAZÓN 1 - ¡Vive la France! (...o algo así) 

Soy una friki de lo francés: del idioma, de cómo te pueden estar mandando a paseo pero en francés suena hasta bonito, de sus pasteles ideales para subir entre 10 y 15 kilos y de sus paisajes de cuento que te hacen olvidar que te has dejado la lavadora encendida todo el día (y luego te acuerdas de Francia, sí, pero más en el sentido de la Revolución Francesa, guillotinas y tal, por la factura que te va a llegar).

En fin, que esta entradilla venía a cuento porque uno de los motivos por los cuales tenéis que leer la novela es porque ocurre en Francia. Y sí, digo que es Francia (o algo así), porque no se sabe a ciencia cierta si la historia está basada en:

a) Una Francia histórica por ahí recóndita o, 

b) Algo fantasioso que recurre a una Francia histórica pero con el aliciente de brujas muy chungas, sacerdotes muy flipados y cazadores mega motivados que se creen parte de Assassins Creed. 

Tampoco es que sea Aramís Fuster, pero me da la sensación de que es más probable la opción B). 

El caso es que una novela en donde todo lo que ocurre tiene una ambientación muy cuidada, te transporta a la Francia de una época en la que las brujas, los conjuros y los embrujos eran el pan nuestro de cada día y cada dos por tres se utilizan chascarrillos, comentarios y frases en la lengua de Napoleón... pues a mi ya me tiene entre sus brazos ;)

Como no podía ser de otra manera, la Iglesia que nos trae la historia de Shelby Mahurin está aburrida y le apetece alguna guerrilla que otra para amenizar su día a día. ¿Cómo podemos creer que un mes resulta productivo sin predicar hasta la saciedad que se rece mucho porque somos todos malos, malos, malos y nos quemaremos en las brasas del Infierno? Oh Dios, yo ya tengo los piececitos calentitos (cosa que con la que está cayendo con Filomena, me viene súper bien).

La cuestión es que hay brujas en Belterra. Y si hay brujas, hay magia. Y si hay magia, hay sacerdotes y cazadores de brujas hormonados con ganas de bronca y de reivindicar su frágil masculinidad. Así que bueno, os podéis imaginar el jaleo que se monta a lo largo de las páginas de esta historia.

Y sí, la magia y las brujas es un tema Win/Win para mí, pero ha sido realmente interesante ver cómo la autora plasma el conflicto brujería/religión desde un punto de vista diferente al habitual. A lo largo de toda la historia, vemos el conflicto desde las dos perspectivas (brujas/Iglesia), comprendiendo las ideologías de unos y otros. 

Aunque la historia tiene muchos puntos de humor, al tratar la dicotomía entre religión y magia, se habla de algo mucho más profundo: los prejuicios, el aprender a ver el mundo desde otras perspectivas y que a fin de cuentas, nada es blanco o negro, que siempre hay matices de gris y que en la guerra nunca hay respuestas fáciles.

En definitiva, Asesino de brujas es una increíble novela de fantasía que incluye todos los elementos que enganchan: brujería, cazadores de brujas, una ambientación deslumbrante, personajes intoxicantes y un romance enemies to lovers que engancha cosa mala y vuelve su lectura un peligro totalmente adictivo. Esta misma semana acaba de salir la segunda parte de esta historia, así que me muero de ganas de leerla (lo de morirme de ganas no es literal, a ver si luego viene un chasseur o sacerdote, que ya sabemos cómo se las gastan ;) 

¡Súper recomendado!

NOTA: 4/5